No hay remedios 100% eficaces para reducir esos kilos que sobran puesto que perder peso es la suma de varios cambios y un compromiso total de la persona que desea llevarlo a cabo. Estos compromisos implican una modificación en los hábitos alimentarios, incrementar la actividad física y cambiar el estilo de vida. Si esa suma falla, entran en acción los complementos alimentícios y el tratamiento farmacológico.
De entre toda la cadena alimentaria, sabemos que la base de la pirámide es lo que hay que consumir preferentemente: alimentación baja en calorías y grasas. Los demás productos también, pero con moderación que es la clave del éxito.
10 Pasos para reducir la grasa en los alimentos:
- La cocción al vapor es tu mejor aliada. Si se puede optar, está es tu elección.
- Poco aceite para cocinar es fundamental. Utiliza plancha, horno, grill o incluso microondas.
- Si usas ollas, mejor que sean de presión rápida o mejor aún, ultrarrápida ya que requieren de poca agua para cocinar y tienen la capacidad de conservar las propiedades de los alimentos.
- Antes de cocinar la carne, retira toda la grasa que veas, por ejemplo, la piel de pollo. Las especias o hierbas aromáticas te ayudarán a recuperar el sabor.
- Los estofados deben cocinarse con antelación y dejarlos enfriar en la nevera. Esto permite que la capa grasa quede visible y en la parte superior, y podrás retirarla mucho mejor antes de comértelos.
- Si vas a echar mayonesa a tu plato porque así lo requiere la receta, asegúrate que ésta sea baja en calorías.
- En las ensaladas, las mejores salsas son las de soja o emplear un yogur rebajado con zumo de limón.
- Recuerda que las salsas o «fritangas» comerciales casi siempre contienen alguna grasa oculta. Si va a ser de tomate, mejor prepáralas con tomate natural sin aceite y a fuego lento, y posteriormente, añádele orégano u otra hierba aromática.
- Utiliza leche desnatada para preparar salsas de leche. Si lo que vas a hacer es una besamel, entonces utiliza margarina baja en calorías y leche desnatada. Y si no tienes margarina, pues solamente aceite de oliva con leche desnatada.
- Utiliza queso parmesano para preparar salsas de queso.
La conocida pirámide de los alimentos
Recuerda que en la base están los cereales, el arroz, el pan y la pasta, junto con las frutas y verduras. Éstos deben ser consumidos diariamente. La parte media de la pirámide contiene la carne, pescado, huevos, legumbres y frutos secos. Un poco más arriba encontramos el yogur, el queso y la leche. Todo este bloque debe tener un consumo moderado.
Y en la parte superior de la pirámide están los dulces, las grasas y los aceites. Su consumo bajo dieta debe ser excepcional y muy estricto si se desea perder peso.
Para cumplir cualquier estándar dietético hay que seguir 10 normas básicas de alimentación:
- Los lácteos deben ser bajos en grasas.
- Hay que tomar más pescado, siendo el marisco y el pescado blanco los que poseen menos calorías.
- La sal en exceso es un enemigo para la salud. No solamente provoca retención de líquidos, sino que aumenta la tensión.
- El consumo de huevos semanal tiene un límite de hasta cuatro. Si no está frito, es bajo en calorías y muy nutritivo.
- El alcohol proporciona un extra de calorías a la dieta carente de valor nutritivo.
- La mejor fuente de grasa que puedes tener en casa es el aceite de oliva.
- Recuerda que nuestro organismo no necesita un exceso de azúcares. Las bebidas refrescantes y los caramelos, entre otros, representan una dosis contundente de calorías.
- De dos a cuatro veces al mes se puede consumir lo que más te gusta: bollería, repostería, helados, cremas, embutidos, dulces, quesos, aperitivos comerciales, y platos precocinados.
- En carnes rojas (cerdo, cordero y ternera) y en aves (pavo y pollo) hay que seleccionar siempre la parte magra.
- El jamón serrano sin grasa, el jamon cocido y los fiambres de pavo son los mejores embutidos para consumir.